¿Conoces a Skip James? Aprende todo sobre él aquí

Nehemiah Curtis James mejor conocido como Skip James, fue un reconocido cantante, guitarrista, compositor y pianista del género blues en Estados Unidos, ¿Estás listo para conocerlo? Descúbrelo ya

Biografía

Nació como Nehemiah Curtis James el 9 de junio de 1902 en una plantación de Mississippi cerca del pueblo de Bentonia y es conocido artísticamente como “Skip James”.

Phyllis, su madre, era una empleada doméstica, y su padre Edward James, los abandonó él cuando era un bebé. Skip solamente recordaba una visita que le hizo alguna vez en donde recibió de su parte una bofetada y empezó a discutir con su madre.

Claramente, Skip no contó con un modelo paterno, el pequeño Nehemiah en menos de lo que pudo darse cuenta, ya se encontraba siguiendo los pasos de su padre. Tanto en la guitarra como en la ocupación de contrabandista de whisky, esta última llegó a interesarle por un momento más que la música debido a que le ofrecía una gran cantidad de dinero.

Estilo musical

Skip James contaba con un sonido muy particular. Fue una influencia para muchos otros músicos del blues, entre ellos Robert Johnson, sin embargo entre tantos artistas, pocos son los que han sido capaces de recrear su estilo debido a la singularidad que presentaba. (Ver artículo: Leadbelly)

Su voz aguda se mostraba frágil y realmente parecía de otro planeta, incluso en sus primeras grabaciones cuando no era mucha la experiencia con la que contaba. Se llegó a comentar, que su manera de cantar era como la de un predicador.

James fue un increíble guitarrista, la afinación que utilizaba casi siempre era Re menos abierto, es decir (Re, La, Re, Fa, La, Re), y su estilo para tocar sin la púa lograba ser prolijo, rápido y cautivador. Hacía uso del registro completo del instrumento, con esto creaba las líneas hipnóticas de bajo.

Se considera a Skip James como un músico sobresaliente, uno de los más importantes bluesman de la época. James lograba tocar con una impresionante soltura, y gracias a su destreza en la guitarra y el piano, podía deleitar a cualquiera, pues no era algo común.

Casi nunca se les consideró a sus canciones como blues convencional debido a la particularidad con la que Skip James trabajaba, de hecho, algunas de sus canciones no parecen en lo absoluto blues. Lo que sí les daba era ese toque personal, con un aire de tristeza oscura que cada letra destila, Skip presenta una suerte de siniestra fatalidad que logra ser atractiva y envuelve.

En más de una oportunidad se llegó a especular cómo hacía Skip James para cantar de esa manera. Muchos especularon que su guitarra era construida de forma única y especial para él, para que lograra ese sonido tan opaco, estas personas eran seguidoras del esoterismo (cualidad de lo que se encuentra oculto a los sentidos y por eso resulta difícil de entender), sin embargo la respuesta era mucho más sencilla.

Skip James hacía uso de una técnica que lleva por nombre “afinación cruzada”, ¿Qué significa esto? Pues no es más que afinar las cuerdas de la guitarra con la finalidad de que suenen al aire en el acorde de Mi menos, o sea, que cuando pulsa las cuerdas sin colocar ningún dedo en los trastes, el acorde suena.

A veces también pulsaba las cuerdas con las uñas en lugar de hacerlo con las yemas de los dedos, esto le brindaba a su sonido una particularidad que lograba cautivar y que muchos buscaban igualar pero les resultaba imposible.

Escuela de Bentonia

Skip es considerado como uno de los mayores exponentes de la Escuela de Blues de Bentonia. Esta tradición la continuó el también cantante y guitarrista, Jack Owens. Existen estudios que niegan la existencia de tal escuela o tal tradición.

Sin embargo, sea cierto o no, algo de lo que no cabe duda es del talento de James y sigue siendo tratado en la industria de la música como uno de los intérpretes de blues más asombrosos y originales de todos los tiempos.

Un evento inolvidable

En el Festival de Newport , al cual se le considera el mayor evento de la música folk norteamericana, el 25 de julio de 1964 se apareció con un aspecto demacrado y mostrándose realmente enfermo.

Mientras avanzaba sobre las tablas de manera inestable hasta llegar a una silla y sentarse, afinaba la guitarra que sostenía, empezó al mismo tiempo a interpretar los siguientes versos “I’d rather be the devil / Than be that woman’s man”.

El impacto que llegó a ocurrir en el auditorio puede catalogarse como electrizante, pues con su voz aguda y con la ayuda de un falsete, logró impresionar a la audiencia que no creía que esa majestuosa voz estuviera saliendo del cuerpo que se encontraba en la tarima. Aunado a esto se tenía los mágicos acordes de la guitarra que agregaban poder a la presentación.

Se encontraba cantando Devil Got My Woman. Peter Guralnick, escritor  presente en el evento, fue testigo de lo que ocurrió y lo define de la siguiente forma: “Las primeras notas empezaron a flotar por encima del campo, y su voz se cernió sobre nosotros, con ese penetrante falsete junto a la afinación de la guitarra, crearon un instante de expectación en el aire” realmente los llegó a sorprender.

Confirma Peter “cuando terminó la canción y Skip, que mientras estaba tocando ya había agarrado confianza, levantó la vista y le regaló una mirada al público, todo el campo estalló en aplausos y silbidos y una parte de la terrible tensión se disipó”.

Esto representó, sin duda alguna, el final de su carrera que había iniciado en la década de los años 20 y fue perdiéndose luego de la Segunda Guerra Mundial. Hasta este entonces Skip se consideraba una leyenda pero no era mucho el material que se pudiese encontrar de él, tan solo un par de grabaciones, de resto todo resultaba muy confuso para conseguir pues los únicos que contaban con el alcance de su material eran los coleccionistas (Ver artículo: Freddie King)

Talento

Skip James logra hacer que el blues suene de una manera tan única que nadie había podido lograr. Lo muestra de una forma poética y profunda, y hace que resulte necesario contar con suficiente capacidad expresiva para interpretarlo.

Se trata de una música que proviene de intérpretes anónimos que poseían conocimientos musicales bastantes limitados y utilizaban técnicas de ejecución que se pueden considerar rudimentarias.

W. C. Handy, otro bluesman, alega que alrededor del año 1903 descubre esta música, esto ocurrió mientras se encontraba en la estación ferroviaria de Tutwiler con un “negro ágil y delgado”, que vestía harapos y cuando tocaba “apretaba un cuchillos contra las cuerdas de la guitarra, de un modo que popularizaron los guitarristas hawaianos que empleaban una barra de acero” dice Handy.

Definitivamente se trata de una tosca y bastante grotesca forma de ejecutar el slide, el cual es bastante común en el blues posterior y a Skip le salía de maravilla.

Un poco después el blues comienza a adquirir una dimensión mucho más comercial como espectáculo y ya se le asocia con nombres propios como Charley Patton, en el Delta de Mississippi, o por otro lado, Blind Lemon Jefferson, en Texas. Sin embargo fue con la llegada de Skip James a la industria, que el blues logra limar asperezas y se vuelve una manifestación artística.

Últimos años

En el año 1931, aproximadamente en febrero, Skip James grabó cerca de 18 canciones en dos sesiones. Por ellas cobró 40 dólares pero jamás se imaginó que luego aquellas canciones serían una gran influencia en la historia del blues. Luego de haberlas grabado, Skip dejó la música y empezó a predicar la palabra del Señor.

Así pues Skip James no regresó a la música. Fue treinta años más tarde que dos jóvenes ingresaron a un hospital en búsqueda de la habitación de un hombre desconocido pero que sabían fue bluesman y se encontraba desaparecido. Este hombre era James.

Esos jóvenes llevaron a Skip James a presentarse frente a nada más y nada menos que 18.000 personas en el Festival de Newport de 1964. Skip se encontraba bastante enfermo, recién le habían extirpado un tumor y le urgía de dinero. Esa presentación ha sido, sin duda, de las más llamativas del cantante.

Muerte

Dos años después, en 1966, el cantante de Mississippi regresó al hospital debido al cáncer, necesitaba realizarse una operación que le era imposible costear, pero ocurrió un milagro musical.

Una banda inglesa llamada Cream (integrada por Eric Clapton, Jack Bruce y Ginger Baker) se encontraba en su debut con un álbum de influencia blusera que incluía a “Im so glad”, una grabación versionada de uno de los temas que había compuesto Skip en los años 30. Con el dinero que llegó a recaudar esa versión Skip James logró pagar la operación y no solo eso, sino que regresó a la música.

En los años que siguieron, Skip volvería a grabar sus dos sesiones del año 1931 además de dos álbumes nuevos. No obtuvo el resultado que esperaba y este trabajo que realizó no alcanzó tanto éxito. James murió pobre el 3 de octubre de 1969.

Legado de Skip James

A partir de aquí su material ha sido revalorizado y un sinfín de artistas en diversas oportunidades han grabado sus recordadas canciones, brindándole así a la música de Skip James una larga vida.

Algo que es totalmente cierto es el talento que poseía Skip James, y su legado es indiscutible. James le dio vida a la esencia del blues rural del Delta. A pesar de haber sufrido y pasado por muchos momentos difíciles durante su vida, mediante sus tristes canciones lograban transmitir un millón de emociones, Skip James logró revolucionar la historia del blues