Biografía de la autora Delmira Agustini y sus poesías

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Te invitamos a conocer en el siguiente artículo un poco más acerca de la vida y obra de una de las poetisas uruguayas más recordadas de la historia como lo fue Delmira Agustini, asesinada de dos disparos en la cabeza a manos de su exmarido.

Delmira Agustini

Delmira Agustini

En nuestro artículo de hoy vamos a indagar más sobre la vida y obra de una de las escritoras uruguaya más destacadas en la historia de ese país como lo fue Delmira Agustini. Ella fue considerada como una brillante poetisa, adscrita al modernismo, que inauguró con su obra lírica la trayectoria de la poesía femenina en pleno siglo XX en el continente sudamericano.

Delmira Agustini integró lo que se conoció como la “Generación de 1900”, a la que también participaron otros personajes reconocidos como Julio Herrera y Reissig, Leopoldo Lugones y Rubén Darío, al que consideraba su maestro, y con el que mantuvo correspondencia una vez lo conoció en la década de 1912 en la localidad de Montevideo.

Agustini se vinculó a la vasta corriente modernista rioplatense la cual estaba dominada en su gran mayoría por hombres, y contó además con la admiración de las principales figuras de la época, tal es el caso de Rubén Darío, Miguel de Unamuno y Manuel Ugarte. Podríamos decir que la tónica general de la poesía de Delmira Agustini es erótica, con imágenes de honda belleza y originalidad.

Biografía

En esta parte de nuestro artículo hablaremos un poco más sobre algunos datos relacionados con la vida de la poetisa Delmira Agustini, una de las más grandes personalidades del Uruguay. Para comenzar vamos a hablar acerca de cómo fueron sus primeros años de vida y que la llevó a apasionarse por el mundo de la poesía.

Primeros pasos

La poetisa uruguaya Delmira Agustín nació en la localidad de Montevideo un 24 de octubre del año 1886. Ella nació en el seno de una familia burguesa, fue hija de Santiago Agustini y de María Murtfeldt. Quienes tuvieron la oportunidad de compartir la niñez con ella, relatan que era una niña solitaria, de muy buena educación y valores.

DELMIRA AGUSTINI

Delmira Agustín fue educada en su propio hogar donde recibió clases de idiomas, específicamente de francés, además de ser capacitada en el área de la música y la pintura, a cargo de maestros particulares. La madre de esta poetisa uruguaya tenía un carácter fuerte, era autoritaria y absorbente, tanto así que logró marcar la personalidad de la joven poeta.

Delante de sus familiares, Delmira Agustín se mostraba como una muchacha con carácter eminentemente dócil, sin embargo de forma paralela logró desarrollar en secreto su verdadera personalidad de poetisa, en versos de un erotismo encendido, triunfal y agónico a un tiempo.

Cuando apenas tenía dieciséis años de edad aparecieron publicados sus primeros poemas y relatos en destacadas revistas de la época: Rojo y Blanco y La Pétite Révue; también en Apolo (revista de arte y sociología, dirigida por Manuel Pérez y Crus). Esta afamada poetisa perteneció a una familia acomodada, descendiente de alemanes franceses y porteños.

La vida y personalidad de Delmira Agustini estuvieron marcadas de enigmas y contradicciones. En su corta vida tuvo una terrible peripecia sentimental que desató su trágica muerte a sus 27 años de edad, hecho que hablaremos un poco más adelante.

Fama y reconocimiento

Cuando tenía dieciocho años de edad, Delmira Agustini escribía columnas en La Alborada. También realizó colaboraciones para una sección titulada “La legión etérea” que firmaba con el seudónimo de Joujou. En esta sección, la poetisa se encarga de hacer retratos de mujeres, perteneciente a la burguesía de Montevideo que sobresalían en la vida cultural y social de la ciudad.

Estos retratos era al estilo modernista, entre ellas destaca la de María Eugenia Vaz Ferreira. En poco tiempo y gracias a su trabajo invaluable, Delmira Agustini se convirtió en un gran personaje dentro de la vida cultural de la ciudad de Montevideo y siempre estaba acompañada por su madre. En la década de 1907 logró publicar su primer libro “El libro blanco” y en 1910 publicó “Cantos de la mañana”.

https://www.youtube.com/watch?v=5Gnb-vaRQ-c

En el año 1912 Rubén Darío, el creador del Modernismo, hizo su arribo a la ciudad de Montevideo y se dirigió a conocer a la poetisa, visita que lo dejó maravillado. Prologó su libro “Los cálices vacíos” con las siguientes palabras: “De todas las mujeres que hoy describen en verso ninguna ha impresionado mi ánimo como Delmira Agustini…. es la primera vez que en lengua castellana aparece un alma femenina en el orgullo de su inocencia y de su amor, a no ser Santa Teresa en su exaltación”

El prólogo escrito por Rubén Darío y dirigido a Delmira Agustini continúa así: “Si esta niña bella continúa en la lírica revelación de su espíritu como hasta ahora, va a asombrar a nuestro mundo de habla española… pues por ser muy mujer dice cosas exquisitas que nunca se han dicho”.

Matrimonio y muerte

La poetisa uruguaya Delmira Agustini se casó el 14 de agosto de 1913 con Enrique Job Reyes, un joven comerciante. Cuando apenas tenía 53 días de haber contraído matrimonio, la joven regresa a la casa de sus padres. Por ese mismo tiempo comienza a cartearse con el también escritor argentino Manuel Ugarte, al que solía ver en Montevideo.

Ya estando en el proceso de divorcio con Reyes, Delmira Agustini visitó en varias oportunidades a su ex marido. Este achacaba la causa de su separación a su madre, la influencia que María Murtfeldt ejercía sobre ella. El fallo de la disolución del matrimonio fue el 5 de junio de 1914. Una tarde del 6 de julio, Reyes la citó en una habitación alquilada.

Estando a solas con ella, Reyes saca una pistola y le dispara en dos oportunidades en la cabeza y luego de eso se quita la vida. Este asesinato fue de gran trascendencia mediática presentando la prensa a ambos como víctimas de un amor irracional. De acuerdo al testimonio de algunos amigos, el cuarto de Reyes estaba repleto de recuerdos y fotografías de la poetisa.

Obra

En esta parte de nuestro interesante artículo sobre la poetisa uruguaya Delmira Agustini estaremos hablando más acerca de las principales obras que hicieron que la carrera de esta personalidad alcanzara los niveles más altos de popularidad, especialmente por ser una de las pocas mujeres en involucrarse en un mundo dominado en su gran mayoría por hombres.

Estilo

La poesía de Delmira Agustini se escribió en la corriente modernista de la época pero cuando el soterrado sentimiento que alentaba en el alma de la poetisa podía expresarse sin trabajas sus palabras alcanzaban una dimensión más auténtica que dio lugar a sus poemas excelsos: Explosión, íntima, Lo inefable, Visión, Otra estirpe, Plegaria.

Los poemas escritos por Delmira Agustini tenían la particularidad de poseer una gran carga erótica, además que sus poemas siguen la línea modernista y están llenos de feminismo, simbolismo, sensualidad y sexo. El alma de Agustini, sin “filtros ni condicionamientos”, queda patente en el poemario “Los cálices vacíos”: La obra es, además una invitación a desandar el camino que la condujo a su yo.

En los primeros poemas realizados por Delmira Agustini se puede apreciar cómo su erotismo se desarrolla con imágenes de cisnes y lagos, flores de loto y jardines perfumados en los que brilla el mármol. Pero su poesía evolucionó y cantó el amor de una forma más auténtica, transformando el discurso modernista con imágenes atrevidas y poco convencionales.

Agustini se encargó de darle una nueva visión del lenguaje erótico concebido por una mujer. Primero admiró pero después provocó el desconcierto de sus contemporáneos.

Mito

Ciertamente Delmira Agustini fue reconocida en el mundo de la poesía por su impresionante talento a la hora de escribir, pero la fuerte carga de su poesía hizo que la crítica pusiera más énfasis en su belleza y su aura etérea. Así nació el mito Delmira, con un valor ambivalente: por un lado, estaba la “niña virginal” y, por el otro, la “Pitonisa de Eros”.

Con todo esto se ponía en énfasis en su escritura producto del instinto. Con la publicación de su libro “Los cálices vacíos”, el escándalo resultó ser aún mayor debido a que no se entendía que la mujer fuera el sujeto de deseo. En él habla de sus experiencias como mujer desde una óptica modernista.

Obras

Durante su exitosa trayectoria como poetisa, Delmira Agustini tuvo la oportunidad de escribir varias obras, entre las cuales podemos destacar:

  • El libro blanco (1907)
  • Cantos de la mañana (1910)
  • Los cálices vacíos (1913)

Ediciones póstumas:

  • El rosario de Eros (1924)
  • Los astros del abismo (1924)
  • Correspondencia sexual (1969)

Correspondencia:

  • Correspondencia íntima Edit. Arturo Sergio Visca (1969)

Memorial

Quienes visiten la ciudad de Montevideo en Uruguay tienen la oportunidad de disfrutar de un espacio memorial que está dedicado a la vida y trayectoria de Delmira Agustini y a todas las víctimas de la violencia de género. Este memorial se encuentra situado en la calle Andes 1206,  lugar donde específicamente Agustini fue asesinada a manos de su exmarido.

Se trata de una emblemática obra la cual fue realizada por el artista Martín Sastre y la misma se inauguró en el año 2014 al cumplirse los primeros cien años del asesinato de la brillante poeta, recordada aún por las nuevas generaciones del mundo.

Bibliografía

  • Agustini, Delmira (1999). Alejandro Cáceres, ed. Poesías completas. Montevideo: Ediciones de la Plaza.
  • Fernández dos Santos, Mirta (ed) (2009). La recepción crítica de la obra de Delmira Agustini por sus contemporáneos: a través de su correspondencia inédita y poco difundida. Madrid: Iberoamericana / Frankfurt a.M.: Vervuert.

Traducciones

  • Agustini, Delmira. Líricas: poesías seleccionadas. Traducción de Gleiton Lentz. Edições Nephelibata, 2005.
  • Agustini, Delmira. Algunos cálices d’Os cálices vazios. Traducción de Gleiton Lentz. En: Cadernos de Literatura em Tradução, n. 8, 2007, pp. 179-201
  • Agustini, Delmira. Poetics of Eros. Traducción de Alejandro Cáceres. Illinois: Willis Barnstone, 2003.
  • Agustini, Delmira. Selected Poetry of Delmira Agustini. Poetics of Eros. Traducción al inglés de Alejandro Cáceres. Southern Illinois University Press, 2008. ISBN 978-0809328680

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